Restaurantes con terraza en CDMX

Quizá sea la terraza más conocida de la CDMX y una de las más pintorescas también, con su privilegiada vista de la Plaza de la Constitución, con Palacio Nacional directo al frente y la Catedral Metropolitana a la izquierda; eso sin contar su cocina de corte mexicano contemporáneo, con un menú que cambia de acuerdo con las estaciones, para siempre ofrecer a los comensales los productos más frescos de cada temporada.

En el Balcón del Zócalo el menú cambia tanto con las época como con la hora del día, ya que por la mañana no faltan los platillos del desayuno aunque pedir una memela con frijoles y puntas de filete de res puede ser una excelente forma de empezar el día; para la tarde-noche, los habituales recomiendan la sopa de tortilla y el pecho de ternera. No obstante, puedes saltarte la etapa de decisión y simplemente pedir su menú de degustación en nueve tiempos, pídelo con maridaje incluido para probar también su selección de vinos, y disfrutar todo lo que esta terraza en el corazón de México tiene para ofrecerte.

La vista del Lago Mayor del Bosque de Chapultepec ya es una experiencia en sí misma, con el espejo de agua que refleja el bosque y el cielo al mismo tiempo, y lo es más todavía si se contempla desde la Terraza o el Muelle del restaurante El Lago, con una copa de alguno de sus cocteles para abrir el apetito o, por qué no, para cerrar una magnífica comida.

La propuesta culinaria de este restaurante con terraza en CDMX va acorde con su espectacular paisaje: platillos netamente mexicanos reinterpretados para darles un toque moderno e internacional, donde los ravioles de pato son la estrella indiscutible, sobre todo si son seguidos por su brownie de mole y miel de guajillo como postre. También aquí ofrecen un menú de degustación, con siete tiempos sin bebidas, en el que probarás un poco de lo mucho que tiene este restaurante para ofrecer; los domingos, que es el día más familiar, ofrecen buffet para el desayuno y la comida, para que completes una experiencia única.

Amici es uno de los mejores restaurantes con terraza en CDMX, con una propuesta de comida italiana que por años ha deleitado a los huéspedes y visitantes ocasionales del Hotel Sheraton María Isabel; este último se encuentra en el corazón de Paseo de la Reforma, una de las avenidas más pintorescas de México, la cual se convierte en el marco perfecto para un desayuno familiar, una comida de negocios o esa cena romántica que le prometiste a tu pareja.

Su carta es breve, pero sustanciosa y desde hace un par de años cuenta con una sección de platillos mexicanos de alta cocina, por lo cual junto a un risotto con champiñones a la mantequilla de trufa negra, podrás encontrar una tradicional sopa de frijol oaxaqueño con quesillo y chicharrón; la especialidad de la casa es el lomo de atún encostrado en ajonjolí o sésamo. ¡Para chuparte los dedos! Los domingos ofrecen buffet para el desayuno y el brunch, con barra de mariscos, pastas preparadas al momento, diversos tipos de sopas y opciones de plato fuerte sencillas pero bien cuidadas; cabe mencionar que para disfrutar de este servicio en la terraza, con vista al Ángel de la Independencia, tienes que hacer reservación.

No solo es uno de los mejores lugares para desayunar, también es uno de esos restaurantes con terraza en CDMX que no puedes dejar de visitar al menos una vez. Aunque es de dimensiones más modestas que otras de su tipo, no por eso es menos acogedora y su ambiente relajado e informal te harán mucho más placentero el desayuno o el brunch, solo, en pareja o con amigos.

Otra razón para visitar Breakfast Roma es que sirven desayuno todo el día, es decir que no importa si llegas a las dos de la tarde, aún podrás pedir sus deliciosos hot cakes de matcha, su omelette de queso de cabra y rajas de poblano o un croque monsieur que te hará agua la boca por su tradicional sabor francés. Porque sí, toda la cocina de este restaurante es de inspiración francesa con toques muy mexicanos; ya que si todavía te faltan razones para visitarlo, te contamos que su terraza es pet friendly, por lo cual no tendrás que abandonar a tu mejor amigo de cuatro patas para poder ir a desayunar.

Una curiosa y muy bienvenida mezcla de tradición y modernidad es lo que encontrarás en La Coyoacana, una de esas cantinas de barrio que están en vías de extinción en la capital, pero que cobra nueva vida en una de las calles empedradas del centro de Coyoacán; la adición de una terraza interior redobló el atractivo del lugar, gracias a la posibilidad de comer al aire libre.

Su menú está entre lo más mexicano que podrás encontrar, pues más allá de las tradicionales botanas de cantina, encontrarás variedad de entradas, sopas, ensaladas, antojitos y de plato fuerte, desde carne tártara hasta un plato combinado que ellos llaman molcajete en el que combinan carne —rib eye, pollo, arrachera o chamorro— con queso, chicharron, cebollitas y chistorra. Y para duplicar el atractivo de su terraza, más allá de poder tomarte unos tragos bajo el cielo capitalino, los domingos instalan ahí su parrilla, donde preparan unos buenos cortes al carbón, que puedes acompañar con algo de su casi interminable carta de licores y tener un domingo tradicionalmente coyoacanense.

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El Nopalito es la opción ideal para desayunar al aire libre al norte de la ciudad, este restaurante con terraza en CDMX es uno de los más tradicionales y con mayor tiempo al servicio de los capitalinos, ya que entró en funciones desde 1949; sus instalaciones en Insurgentes Norte incluyen un amplio jardín donde podrás ordenar tu comida y disfrutar en un ambiente fresco y placentero.

La comida es 100 % tradicional mexicana, sin pretensiones pero con mucho sabor; si quieres puedes iniciar con una orden de nopalitos o de quesadillas de la casa, seguirte con un consomé de carnero o de pollo; una orden de barbacoa, un corte de carne o un chile relleno de mariscos de plato fuerte y de postre unos chongos zamoranos que te harán el día. Si vas entre semana a la hora de la comida, es decir entre tres y cuatro de la tarde, encontrarás un mariachi o un son jarocho para amenizar el ambiente; su terraza/jardín, además, es perfecta por si llevas niños, ya que ahí podrán jugar y correr a sus anchas.

Jardín Juárez es uno de los mejores restaurantes al aire libre en CDMX y tiene mucho que ofrecer a todo aquel que quiera adentrarse en su amplio y soleado espacio; cuenta con largas mesas comunales de madera rústica, sombrillas, un espacio verde para alargar la sobremesa, así como comida y bebida por montones.

La comida incluye los clásicos snacks de bar, con un toque internacional, como hamburguesas, fish & chips, ensaladas, salchichas alemanas y tortas, entre otros; para tomar, su amplia carta de coctelería tiene para todos los gustos y ni qué decir de sus cervezas artesanales, perfectas para quitarte el calor o para acompañar los sándwiches fritos que son la especialidad de la casa. Los viernes por la noche un DJ ameniza la velada y, con un poco de suerte, si vas el sábado te encontrarás un grupo de música en vivo, sin cover ni consumo mínimo; los domingos, el brunch familiar es de ley y además es pet friendly, aunque, eso sí, tu amigo peludo deberá portar su correa todo el tiempo.

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Subir al cuarto piso del centro comercial Barrio Alameda es encontrarse con una de las mejores terrazas y restaurante al aire libre en el Centro Histórico de la CDMX; La Azotea es un espacio libre y sin pretensiones, donde podrás comer y beber a tus anchas, con una magnífica vista tanto de la Alameda Central como de la Torre Latinoamericana y otros edificios de Avenida Juárez.

Su comida es igual de sencilla y su carta es breve pero llena de sabor, con una variedad de entradas como una ensalada o una orden de chistorra, sándwiches como el muy argentino choripán, un hot dog o una baguette; también ofrecen cortes de carne a la parrilla y un par de postres para cerrar bien la comida. Para saciar la sed tampoco tienes pierde: cervezas artesanales, mezcales, licores y una buena gama de coctelería. Por otro lado, el ambiente está amenizado por un DJ, los viernes y sábado ofrecen cenas y vino casual, mientras que los domingos hay un brunch igual de sencillo que su menú entre semana; cabe señalar que aquí la acción termina temprano, de modo que es un buen lugar para el "pre-antro" y luego ir a buscar emociones más fuertes en los bares del Centro Histórico.

Los patios y jardines de esta hacienda del s. XVII se transformaron en una de las mejores terrazas en la CDMX, dentro de uno de los restaurantes más típicos de San Ángel y punto de visita obligado tanto para locales como foráneos; es ideal para almorzar en familia, especialmente en fin de semana, o para una comida de negocios entre semana.

El menú es de comida mexicana contemporánea con un toque gourmet; si pruebas la sopa de tortilla, la sopa azteca o los chiles rellenos de ninguna forma te arrepentirás; los escamoles y las crepas de huitlacoche son otro platillo obligado y si andas de un ánimo más exótico, el pato en salsa de zarzamora es justo lo que necesitas, rematado con una crema Bavaria para el postre. Su terraza, en realidad el patio central de la ex-hacienda, tiene un ambiente fresco y acogedor, acentuado por la gran fuente central, rodeado por macizos florales con jacarandas, rosas y nochebuenas; las mesas y sillas de hierro forjado le dan ese aire rupestre mexicano y la música de tríos, mariachis o pianistas redondean el panorama.

Ubicado en una casona porfiriana en la esquina de Orizaba y Guanajuato, Madre Café es una adición relativamente reciente a la gastronomía de la colonia Roma, a la cual llegó con una propuesta innovadora en la que el café es la estrella; esto último, no solo en sus formas más tradicionales, sino en su forma de carajillos, esos cocteles a base de café que se han vuelto tan populares a últimas fechas.

Su menú es muy amplio, con una gran gama de sabores y combinaciones a elegir, como los ravioles de ricotta, la pizza de stracciatella, el mac & cheese de chipotle y camarón o algún corte de carne o pesca del día; todo esto preparado con la maestría del chef Víctor Zárate, gran responsable del auge de Madre Café. La terraza, ubicada en lo que fue el patio de la casona, es un lugar amplio y bien ventilado, con mesas de madera, bancas de piedra y sillas de acero, donde puedes tomar un perfecto desayuno al aire libre, una comida fresca en el verano o una cena romántica con tu pareja.

Es un oasis oculto en medio del bullicio de la colonia Roma, ya que el edificio —una casona del siglo pasado— donde se ubica el Hotel Casa Awolly, uno de los mejores restaurantes en CDMX que no tiene ni un letrero, ni una señalización, nada que indique el maravilloso lugar que se halla en su interior. En el primer piso encuentras el restaurante, los dos siguiente niveles son cuartos o salones para eventos privados y en el último encuentras la terraza.

El plato estrella del restaurante es el tuétano con short rib, sin embargo, el arroz a la tumbada y el pulpo a la madrileña tampoco decepcionan y ni hablar del suadero con setas en curry verde, que está para chuparse los dedos. Para tomar encuentras de todo, pero los que van siempre regresan por la coctelería. Este restaurante con terraza en la CDMX hace magia en su último piso con cócteles cuya carta hace rotación por temporadas, pero siempre con temas esotéricos como el tarot o el zodiaco; por ello, encontrarás nombres como "Sacerdotisa", "Emperatriz" o "Tigre", todos ellos con sabores y combinaciones únicas que no olvidarás.

Parrilla Paraíso es otro de los mejores restaurantes al aire libre en CDMX, especialmente si vives al sur o si tienes ánimo para hacer el viaje, aunque es casi seguro que no te arrepentirás; sus sabores inspirados en la cocina uruguaya, con un toque del mar de Baja California, son únicos e irrepetibles; su ambiente también lo es, en un amplio espacio con mesas y bancos de madera.

Como su nombre lo indica: aquí todo pasa por la parrilla, desde los cortes de carne y los pescados, hasta las pizzas, las verduras e incluso las frutas; el pan, la base de la pizza e incluso la mayonesa y la catsup son preparados en el lugar, lo mismo que el chimichurri, ideal para aderezar ese asado de tira, el chorizo bombón o la morcilla que le dan identidad al lugar. Y como estamos afuera, bajo el sol o en medio de la brisa, lo ideal para tomar es una cerveza y aquí las más apreciadas son las artesanales de productores locales; si se trata de cocina uruguaya, los vinos no pueden faltar, tanto charrúas como chilenos, mexicanos y argentinos; el menú infantil hará las delicias de los pequeños y además es pet friendly, para que tu peludo te acompañe en la comida.